El tiempo, siempre el tiempo. Si sigo así, me veo pronto como Momo perseguida por hombres grises...
Así que hoy, un baturrillo. En tres movimientos.
1er movimiento. Allegro maestoso
La mañana |
El mediodía |
El anochecer |
Se trata de tres fotogramas consecutivos de la serie Érase una vez... El hombre (Cap. 5, Los primeros imperios), de la que extrajimos algunos hace poco. Aquí, el maestro le explica a Pierrot/Pedrito en qué consiste un reloj de sol.
2º Movimiento: andante espressivo
Uno de esos ángeles de los que ayer hablaba, y por el que sentía aprecio. La magnífica persona tras la que se ocultaba su simpático homúnculo de gafas oscuras falleció durante un viaje. Visito de vez en cuando su blog, ya cementerio. La última entrada, precisamente, fue escrita por su hijo para dar la noticia.
3er Movimiento: Rondó capriccioso
Y por último, un caballo de Troya, aún sin terminar, de Na Jordana. Homenaje a este otro, al que me refería hace poco. Agradezco a Carlos Javier, autor de Redes Sociales, y habitual lector de este blog, por trasladarme conocimiento de esta noticia.
Finalmente, el tiempo me ha sacado ventaja...