Para acabar con este pequeño paseo que le he dedicado al cine ruso de animación, y por redimirme con el presente que tanto castigo, os traigo una obra del singular Aleksandr Petrov. A propósito de lo que dijo el otro día aquí el amigo, increíble lo que en Rusia han hecho tras el telón de acero... pero también sin él.
Para muestra un botón. Petrov, discípulo (y aventajado) de Yuri Norshtéin, al que ayer le dedicamos la entrada. Su técnica es impresionante. Se basa en pintura al óleo sobre vidrios, que coloca a varios niveles para dotar a la imagen de profundidad, y la utilización de los dedos en vez del pincel. Por último toma fotografías, en gran formato, de los vidrios que irá modificando sucesivamente, y que irán conformando los fotogramas del filme.
Claro está que esta técnica requiere tiempo (y mucho), y que pocos animadores en el mundo son capaces de llevarla a cabo. La película que podemos ver a continuación, Моя любовь (Mi amor, 2006) exigió tres años de duro trabajo, y es su último trabajo individual hasta la fecha.
Impresionante e increible... Gracias por compartir el arte y hacerlo mover...
ResponderEliminarGracias a ti por tu visita. Me alegro que te haya "impresionado", jeje.
EliminarSaludos
gracias, y mas gracias por compartir tu sabiduria, me ha hecho cambiar el chip.
ResponderEliminarPues no sé en qué sentido te ha podido cambiar, pero si es algo positivo, me alegro muchísimo.
EliminarUn saludo, amigo.
Son unas imagenes geniales. No había visto nada parecido, pero me han encantado. Gracias por compartirlo. Saludos.
ResponderEliminarNo es muy habitual verlo, la verdad. Como dije, son muy pocos los que dominan esta técnica... Pero es que además hay que saber pintar. Últimamente, con tanto ordenador, se olvida el trabajo "de campo". Y éste todavía tiene mucho que explorar.
EliminarGracias por pasarte y comentar.
Me encantó esta entrada. Excelente animación, no me extraña que tarden tanto en crearla. #PTB
ResponderEliminarSí, es una pasada el tiempo empleado. Cada fotograma es un óleo diferente, manipulándose todos los vidrios a la vez. Incluyendo la técnica cinematográfica (que ya empleó Norshtéin) de desplazarlos de forma horizontal y vertical para darle mayor profundidad.
EliminarSaludos, Jose Romero, y gracias por tu visita.
Excelente el trabajo de este artista, a pesar de la limitación de recursos y las condiciones históricas que le tocó vivir, sus obras están hechas con un refinamiento y técnica soberbia...
ResponderEliminarMe encantó (creo le dedicaré algún post jejeje). Gracias por compartir.
Un abrazo.
Pero tuvo grandes maestros, como Norshtéin, que equilibra la balanza.
EliminarEstaré encantado de que le dediques una entrada. Cualquiera de sus trabajos o su obra en conjunto bien lo merecen
¡Qué maravilla! Es tan pictórico, como ver pintura en movimiento. Me encanta la textura que consigue con esta técnica. Gracias por traernos estas joyas
ResponderEliminarAsí me pareció, un cuadro de Monet o Renoir en movimiento. Pero también me encantó esos saltos que da entre la realidad y las ensoñaciones, realmente muy vivos.
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